Depresión

Desde que despertó Kook no ha sido igual, no sale del cuarto, de hecho se fue a otro, no me deja verlo, tocarlo, abrazarlo. Le llevo comida todas las mañanas antes de irme al trabajo, dejándolo en la entrada de la puerta y cuando regreso de trabajar ahí mismo encuentro la comida, sin ser tocada.

No sabía si seguía ahí adentro con vida, pero cuando oía como bajaba la cadena del baño o se veía la ventana abierta, sabía que aún vivía. Pero ya me estaba hartando, no soportaba más está situación, pese a lo que era ya no sabía que más hacer para sacarlo de ahí.

Antes de llegar a casa pase a una tienda de peluches y compré el oso, más grande y bonito que vi junto con unas rosas. Me permití sentarme en la esquina de la cama, mientras lo observaba, olía las flores y se restregaba en el oso, creo que este era el momento de hablar.

<Nunca me dijiste que estabas enfermo>

Kook: Nunca lo preguntaste

Su voz se oía rasposa, creo que por falta de hablar, quiero pensar eso y no que sea algo más grave.

<Si te lo pregunté>

Kook: No lo hiciste, preguntaste si era alérgico a algo, no que si estaba enfermo

Tenía razón, pregunté una sola cosa y ahora estaba así por mi culpa.

<De todos modos lo siento>

Kook: No tienes que disculparte

<Si tengo>

Kook: No importa, conmigo no es con quién debes disculparte, sino contigo mismo

<¿Qué estás hablando?>

Kook: Pronto moriré, si sigo sin comer bien y cosas así no viviré por mucho, mira lo que he adelgazado, más bien la pregunta es para ti ¿Qué seguirá después de que ya no esté aquí?

<¿Por qué lo dices?>

Kook: Yo moriré, pero y tú ¿Comprarás a alguien más? ¿A otro niño de 13 años?

<No es...>

Kook: No digas nada, todos mis sueños y metas quedaron en el pasado, frustrados al momento de perder mi libertad pero seré libre al final ¿Y tú? Seguirás igual de vacío, tienes todo y a la vez nada

<No dejaré que te vayas>

Kook: Una vez mi madre me dijo existió una vez un pobre, pero tan pobre que sólo tenía dinero y eso eres tú

<Te equivocas>

Kook: No lo hago y tú lo sabes, a mí no me engañas, te engañas a ti mismo pero tú sabrás

<Yo sólo quiero tu perdón, enmendar las cosas malas que hice contigo>

Kook: ¿En verdad quieres hacer eso?

<Sí>

Kook: No es verdad

<¿Qué? Sí, es verdad>

Kook: Dices qué quieres enmendar las cosas, los errores que cometiste conmigo ¿Me dejarás volver a casa? ¿Me dejarás volver a mi madre?

<No, pero puedes pedir cualquier otra cosa y te la daré>

Kook: No estás dispuesto a dejar ir, a soltar y menos a enmendar tus errores con un niño de tan sólo 13 años que tú, le quitaste la libertad, el derecho a soñar, su familia pero sobretodo más que eso te estás quitando la poca humanidad que puede haber en ti